Este 15 y 16 de febrero, se llevó a cabo en la Pontificia Universidad Católica del Ecuador el Primer Congreso Nacional de Geografía del Ecuador, con el nombre “Territorios en transición: Transformaciones de la Geografía del Ecuador en el siglo XXI”. Desde el área de Medios de Vida y Paisajes Sostenibles, CONDESAN fue co-organizador y ponente.
El Congreso, que es una plataforma académica para la realización del XVII Encuentro de Geógrafos de América Latina que se llevará a cabo en Quito en 2019, tuvo como objetivo compartir y discutir trabajos académicos y prácticos sobre las transformaciones del Ecuador en el siglo XXI e impulsar los estudios geográficos de profesionales, docentes, investigadores y estudiantes de grado y posgrado en el país.
Se plantearon 11 ejes temáticos: 1) Ecosistema y sociedad, 2) Procesos físicos, cambio climático y riesgos, 3) Ciudad y transformaciones urbano-rurales, 4) Paisajes geográficos y ruralidad, 5) Espacio, poder, acción colectiva y subjetividad, 6) Sociedad, espacio y tiempo: geohistoria y ciudades en Ecuador, 7) Estado, inversión pública y territorio, 8) Espacio del capital y territorios de libertad, 9) Planificación, gestión y ordenamiento territorial, 10) Tecnologías geoespaciales y geoinformación; y, 11) Enseñanza y formación geográfica en el Ecuador.
Manuel Peralvo, Coordinador de Investigación del Programa Bosques Andinos (PBA) en CONDESAN, presentó este viernes, en el marco de la mesa de planificación, gestión y ordenamiento territorial, un estudio de caso para identificar y priorizar áreas para la restauración de bosques Andinos, a partir del trabajo del PBA en el Noroccidente de Pichincha.
La metodología propuesta permite optimizar decisiones de inversión en restauración, enfocándose en áreas con mayores probabilidades de mantener objetivos de restauración en el largo plazo. Los otros ponentes en esta sesión resaltaron la importancia de incorporar múltiples dimensiones de amenazas y vulnerabilidad en las visiones de planificación a nivel nacional. La participación local y el vínculo directo de la academia con poblaciones vulnerables es un componente importante para la planificación adaptativa. También se identificó la importancia de articular objetivos de gestión del territorio a nivel parroquial, cantonal y provincial, para potenciar acciones colaborativas en la implementación de prácticas de manejo sostenible de la tierra, de conservación y restauración de ecosistemas.