Ecuador construye el Plan de Acción para la Neutralidad de la Degradación de la Tierra y Conservación del Recurso Suelo

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Datos informativos:

  • La degradación de la tierra es el proceso a través del cual disminuye la capacidad actual y potencial de la tierra, entiendo a esta como el conjunto de los componentes suelo, agua, bosques, sistemas agrícolas, para producir bienes y servicios cuantitativa y cualitativamente (Mecanismo Mundial, 2008).
  • Desde el año 2.000 el 18% de la superficie presenta procesos de degradación activa (MAATE, 2023). Entre las principales causas de la degradación en el país están la deforestación, pérdida de la vegetación, la erosión tanto hídrica como eólica, los incendios forestales, la ganadería intensiva en ecosistemas frágiles, las prácticas agrícolas poco sustentables, el manejo inadecuado de cuencas hidrográficas, entre otros (Segarra 2014).

Ante esta problemática, el Ecuador impulsa acciones para prevenir la degradación de la tierra y recuperar funciones ecosistémicas y productivas de paisajes degradados.

Como parte de la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación (CNULD), el país se compromete con el Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) 15 para alcanzar la Degradación Neutral del Suelo, combatiendo la desertificación y recuperando tierras degradadas. Además, la Constitución establece un marco normativo para proteger el suelo, previniendo su degradación y erosión.

En este sentido, con el fin de definir una estrategia para alcanzar la Neutralidad de la Degradación de la Tierra en el Ecuador, la Autoridad Ambiental Nacional (MAATE) y la Autoridad Agraria Nacional (MAG), a través del Proyecto Neutralidad de la Degradación de la Tierra (NDT), se desarrollaron, entre los meses de abril, mayo y junio del 2025, seis (6) talleres en las provincias de Imbabura, Chimborazo, Loja, Napo, Morona Santiago y Manabí, con el objetivo de construir el Plan Nacional de Acción para la Neutralidad de la Degradación de la Tierra y Conservación del recurso suelo (PNA NDT&CRS), el cual se abordó la problemática de la degradación de los ecosistemas y paisajes productivos de forma integral. Este proceso participativo, contó con la participación de actores clave, en áreas de recursos naturales y de producción agropecuaria, con representantes de las diferentes Direcciones Provinciales del MAATE, MAG, INIAP, Agrocalidad, representantes de Áreas Protegidas, Gobiernos Autónomos Descentralizados Provinciales, GAD Municipales que tienen Áreas de Conservación y Uso Sostenible (ACUS), y representantes de las principales Universidades de las regiones.

En los talleres, se identificaron las principales problemáticas de degradación de la tierra de cada provincia, entendiendo los drivers y causas subyacentes bajo estas problemáticas. Además, como parte de su metodología, se utilizó el mapa de degradación de la tierra, reportado ante la Convención de las Naciones Unidad de Lucha Contra la Desertificación (CLULD) en el informe PRAIS 2023 (Programa de Revisión y Evaluación de la Implementación de la Acción Nacional), para analizar las dinámicas que están generando degradación de la tierra en cada provincia.

Por su parte, Natalia Rumazo, Directora de Riesgos y Aseguramiento Agropecuario del Ministerio de Agricultura y Ganadería, sostuvo que “la construcción del Plan tiene un enfoque nacional, que lo estamos desarrollando de una manera participativa con actores clave locales, conocedores de su territorio, que nos permite, con esta política pública, seguir produciendo, recuperar áreas degradadas, disminuir la presión hacia los sistemas frágiles (páramo, bosque y suelo) en donde normalmente se producía y ahora vuelvan a tener su vida y riqueza fértil para producir los alimentos que necesitamos y garantizar la seguridad y soberanía alimentaria”.

Johnny Mena, Especialista de la unidad de Cambio Climático del MAATE, manifestó que “el Plan Nacional de Acción de Neutralidad de Degradación de la Tierra y la conservación del recurso suelo, busca integrar 3 enfoques, el recurso hídrico, los ecosistemas y los suelos, con una mirada sostenible y sobre todo de conservación, solventando las necesidades y medios de vida de las poblaciones que viven de los suelos el ciclo del agua y de los servicios de ecosistémicos”.

Cecilia Ponce, coordinadora de Proyectos en FAO Ecuador, destacó la importancia en la construcción del Plan, como un gran paso muy importante para el país. “Estamos en un ejercicio participativo, conociendo las iniciativas y la problemática, pero también las oportunidades de la gente para lograr la neutralidad de la degradación de la Tierra en el Ecuador. Este Plan de Acción, contribuye a los ODS 2 y 15; y de los objetivos que contribuyen al cuidado de la naturaleza que obedece al aseguramiento de la soberanía alimentaria. No podemos hablar de un ambiente sano sin preocupamos también por alimentos saludables y por su gente” sostuvo Cecilia.

María Ríos, especialista de desarrollo sostenible para el Gobierno Provincial de Imbabura, ratificó el trabajo articulado de la Prefectura con el Proyecto NDT: “Estamos ejecutamos varias acciones que apoya a los procesos de degradación de la tierra, como es la reforestación en varias localidades; el fortalecimiento de capacidades a los grupos organizados del bosque seco y con los grupos de investigación que están desarrollando con el nodo de degradación de la Tierra; el vivero; y demás actividades que contribuyen a proyectar un mejor manejo del recurso suelo en la provincia”.

Hallazgos:

  • Se confirma que la ganadería es una de las actividades que mayores impactos genera sobre el cambio de cobertura de la tierra a nivel nacional.
  • Se presentó las preocupaciones por el incremento de monocultivos, prácticas con agricultura convencional combinadas con sobreuso de agroquímicos lo que genera importantes impactos en el agua, suelo y biodiversidad. En la Sierra específicamente, los cultivos en laderas se muestran como otra de las preocupaciones para la degradación de la tierra y los incendios forestales. A esto se suma que las estribaciones de la cordillera, valles interandinos y páramos en las provincias de la Sierra son zonas susceptibles a procesos de degradación de la tierra debido a la combinación de factores como el clima, las características biofísicas de los paisajes y las malas prácticas de manejo del suelo.
  • En la Amazonía, la expansión de cultivos como el cacao, la palma, la caña con prácticas de agricultura convencional son la principal amenaza.
  • En la Costa, el cultivo de maíz es uno de los principales expansores de la frontera agrícola, siendo las zonas costeras de las Provincias de Manabí, Santa Elena, Guayas y El Oro en la Costa del país los más afectados por sus características de déficit hídrico. Además, en todas las regiones se recalcó la necesidad de fortalecer políticas y competencias para el control de la expansión de la frontera agrícola, así como la coordinación en la planificación territorial.
  • Se mencionó también la necesidad de contar con mecanismos de articulación entre MAATE y MAG. Se evidenció que no se cuenta con reflexiones sobre las consecuencias de las dinámicas productivas en los paisajes a mayor escala, repercutiendo estas sobre recursos naturales, bosques, páramos, y recursos hídricos. Por último, se recalcó la urgencia de fortalecer mecanismos de la conservación del patrimonio natural del país pues no se respetan las normas de uso y manejo de Áreas Protegidas, Socio Bosque está cada vez más debilitado y las ACUS tiene aún vacíos en sus normativas.

Posterior a esta fase de diagnóstico territorial, el Plan Nacional NDT&CRS entra en una fase de diseño propositivo en donde en base a la problemática y potencialidades, se definen líneas estratégicas y acciones por áreas geográficas específicas que respondan no sólo a qué hacer para combatir procesos de degradación de la tierra sino dónde es prioritario. En general, los talleres nos muestran la necesidad de establecer políticas que fortalezcan la transición hacia sistemas productivos sostenibles que no sean una presión para los remanentes de cobertura vegetal ni la fauna silvestre, que garanticen la seguridad y soberanía alimentaria y se articulen con mecanismos financieros que respalden este modelo productivo.

El Proyecto NDT, proyecto del Ministerio del Ambiente, Agua y Transición Ecológica; y del Ministerio de Agricultura y Ganadería, que cuenta con la implementación y asistencia técnica de FAO-Ecuador, el financiamiento del fondo GEF y la ejecución del CONDESAN, busca complementar los esfuerzos nacionales para impulsar la generación de un cambio transformacional y de aprendizaje del enfoque de NDT para reducir y revertir los procesos de degradación de la tierra, promoviendo el desarrollo sostenible de comunidades rurales, asegurando la provisión de servicios ecosistémicos y la soberanía alimentaria.

Autores:

  • Alexandra Garcés, Especialista en Gobernanza y Planificación, Proyecto NDT
  • Manuel Peralvo, Coordinador Nacional del Proyecto NDT
  • Giovanny Cevallos, Especialista de comunicación – CONDESAN
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