Por: Ronald Jaillita Rodríguez, María Magdalena Choque Nogales, Darío Samuel Murillo Montaño
“…cayó granizo grande como el tamaño de un ciruelo y hemos visto cómo agujereaba las tejas (…) no tengo nada ahora, ni para cosechar, todo se ha perdido…”
Leónidas Arze (periódico Los Tiempos)
Entre el año 2021 y comienzos del 2022, más de 36 municipios en Cochabamba fueron afectados por desastres naturales como inundaciones, sequías, heladas, granizadas, etc., agravados por el cambio climático. Uno de los sectores más perjudicados es la agricultura; lo cual no sólo afecta la seguridad alimentaria local, sino también la nacional.
Según datos de la Unidad de Gestión de Riesgos del Gobierno Autónomo Departamental de Cochabamba, durante la gestión 2021, las inundaciones, heladas y sequías son los desastres que más dañaron a la agricultura. Las primeras afectaron a alrededor de 10.000 familias y 1.549 hectáreas de producción agrícola. Las segundas impactaron a, aproximadamente, 9.149 familias y 8.119 hectáreas de cultivos entre hortalizas y legumbres destinadas al consumo local. Por otro lado, la sequía hizo sentir sus efectos a 8.389 familias y 4.965 hectáreas de cultivos. En un recuento total, más de 20.000 familias y 18.000 hectáreas de producción agrícola fueron afectadas.
«…tratamos de ser más cuidadosos con el uso del agua, tratamos de aprovechar la lluvia y ahorrar el agua para que nos aguante más, y tengamos con qué producir”
Martha Flores, Agricultora de Omereque (Periódico Los Tiempos)
En este contexto, es necesario implementar acciones concretas para adaptarse y reducir la vulnerabilidad. Para contrarrestar las sequías y la escasez de agua se puede realizar cosecha de agua, desviar manantiales naturales hacia tanques y cavar pozos de infiltración para acumularla. Ante las heladas, se emplean sistemas de riego por aspersión para aislar a las plantas de las bajas temperaturas. También se pueden implementar acolchados térmicos sobre los cultivos. De esta manera, se pueden contrarrestar los impactos del clima sobre la cadena productiva, disminuyendo el riesgo de falta de alimentos. ¡La adaptación es trabajo de todos!
Esta nota fue elaborada por jóvenes que formaron parte del Programa de Formación de “Líderes frente al cambio climático y la resiliencia de Cochabamba”, una iniciativa del Proyecto AICCA Bolivia y el Gobierno Autónomo Departamental de Cochabamba. A través de esta actividad periodística, se pretende que los participantes investiguen y visibilicen el impacto del cambio climático en su región, promoviendo el involucramiento social en acciones de adaptación al cambio climático. El contenido es responsabilidad de los autores.
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